Delirios de letargo (VII)

Que las lagrimas de esta noche sean lluvia para el árbol de mañana
Que aún que no llueva siempre quedará la brisa matinal
Verdes hojas brotaran
Y antes que la flor se halle marchita nacerá una verde manzana


Si sueñas con llegar a las nubes construye unas buenas alas
Busca un alto pino por el que trepar
No dejes de buscar la manera para los pies del suelo separar

CadenasdesaL

Una moneda de TRES caras en el aire
Soy yo
Abre las manos
Cógeme al vuelo
Acurrúcame

Sostén el otro extremo de la cuerda
Déjame correr
Tira de vez en cuando
Quiero ver
Verde talvez
De vez en cuando en el edén

.

Otro, asfalto que pisar,
techo que establecer
,musa que conquistar
y sueños que desadormecer


adicto a las primaveras
más o menos, todas dejan huella
las mas cortas minutos entre las piernas
las largas rosas de espinas en mi azotea


No es suficiente un paseo para aprender a correr
Ni un par de alas para emprender el vuelo


Si tropiezas en la escalera al cielo,
te guardo sitio cerca,
déjate caer al infierno


Y si algún día pierdo el norte, búscame en el sur
Anduve falto de sol
Que mi brújula lleve por aguja el sentimiento
Ni emociones, ni el amor, ni el recuerdo de lo vivido

Y grises...gris és!

Corro por las venas de este oscuro laberinto

Busco definir la superficie de lo profundo

el objetivo del sujeto

la atracción por lo complejo

La lluvia llena mi cara de humedades que dejan huella

las nubes que ves son grises

ves que nubes más grises?

no hay nubes y el cielo es azul, oscuro

el dios sol odia a los noctambulos

y grises...gris és, al rodar, el tablero de ajedrez

blancas y negras, a morir por un mismo podio,

aprender a amar odiando su alrededor